Mirar la miseria con el Corazón

“Vayan a aprender lo que significa: misericordia quiero y no sacrificios.”

Mateo 9,13

La palabra misericordia está formada por dos palabras latinas: “míser”, miseria, miserable y “cordis” corazón, por lo que juntas hacen referencia a la miseria del corazón. Esta frase del evangelio Jesús se la dice a los fariseos como echándoles un “boche” por ser legalistas en su crítica, porque él se juntaba con los pecadores –los recaudadores de impuestos para Roma, como Mateo, eran considerados como pecadores-. Los fariseos era legalistas-justos (lo que diga la ley), Jesús es misericordioso (mira nuestra miseria con el corazón).Cuando él nos manda a aprender qué significa “misericordia quiero y no sacrificios”, quiere que miremos las miserias de los demás con nuestro corazón, que guarda también nuestra miseria, la que todos particularmente tenemos y conocemos muy bien. Aquí tienen sentido las palabras que Jesús dijo en otra ocasión “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra” En este tiempo de cuaresma la Iglesia siempre nos llama a prestar más atención a la oración, al ayuno y a la limosna. Por medio de la oración nos unimos más a Dios, por medio del ayuno nos trabajamos a nosotros mismos y por medio de la limosna, al dar y darnos, nos encontramos con los hermanos. Demos limosna con misericordia y demos misericordia, que así recibiremos misericordia; a veces cuesta, pero ese es el sacrificio que Dios quiere.

Si quieres que comparta una reflexión sobre algún texto bíblico en específico puedes decirme con toda la confianza. Jesús te bendice!